Quantcast
Channel: Plantas - Jardineria On
Viewing all articles
Browse latest Browse all 3898

Guía completa de cuidados del árbol de maple: desde el arce japonés hasta el Autumn Blaze

$
0
0

Hojas de árbol de maple o arce japonés.

El árbol de maple, también conocido como arce, es una de las especies más atractivas y versátiles que se pueden incluir en un jardín. Desde ejemplares de gran porte como el Autumn Blaze o el arce Matador™ hasta las versiones ornamentales en bonsái del arce japonés (Acer palmatum), todas las variedades comparten algo en común: proporcionan belleza visual, tonalidades vibrantes en otoño y una estructura que embellece cualquier espacio natural o urbano.

Pero como ocurre con todas las especies vegetales, cada tipo de arce tiene sus propios requerimientos de cuidado. Algunos son más resistentes y crecen rápidamente, mientras que otros necesitan mimos extra e incluso protección frente al sol o las bajas temperaturas. Para asegurarte de que tu árbol de maple crezca sano y con fuerza, hemos preparado esta guía detallada y práctica con todo lo que necesitas saber sobre su ubicación, riego, poda, trasplante, enfermedades, reproducción y mucho más.

¿Qué tipo de árbol de maple tienes?

Antes de adentrarte en su cuidado, conviene identificar de qué variedad hablamos. Aunque todos pertenecen al género Acer, se diferencian bastante en tamaño, forma o resistencia:

  • Autumn Blaze: híbrido entre el arce rojo y el plateado. Se caracteriza por un crecimiento rápido, gran tamaño y espectaculares colores otoñales.
  • Arce japonés (Acer palmatum): ideal para bonsáis, jardines pequeños o decoración ornamental. Tiene un crecimiento más lento, hojas delicadas y gran variedad de cultivares de tonos rojos o verdes.
  • Arce Matador™: otra variedad híbrida, muy resistente, con follaje otoñal de gran impacto visual.
  • Arce azucarero (Acer saccharum): es el que produce el famoso sirope de maple. Árbol robusto, caducifolio, y nativo de Norteamérica.

¿Dónde plantar un árbol de maple?

Escoger la ubicación correcta es esencial. Aunque la mayoría de los arces toleran tanto el sol como la semisombra, es importante entender de qué variedad se trata y qué clima hay en tu zona.

Los arces de gran tamaño como el Autumn Blaze o el Matador™ se desarrollan mejor a pleno sol, aunque pueden tolerar algo de sombra parcial. Es importante que haya suficiente espacio para su copa, que puede superar los 12 metros de diámetro. Evita plantarlos cerca de estructuras o líneas eléctricas.

Los arces japoneses prefieren zonas con semisombra, especialmente en verano. El sol intenso puede quemar sus hojas, sobre todo en variedades de follaje fino o color púrpura. También agradecen ubicaciones resguardadas del viento.

En bonsáis, lo mejor es mantenerlos en el exterior todo el año, evitando cambios bruscos de ubicación, ya que se resienten si los trasladas con frecuencia. Si quieres saber más sobre la ubicación ideal, consulta nuestra guía de cuidados del árbol de maple.

Tipo de suelo ideal

Semillas de arce.

El suelo es un factor crucial en el desarrollo de los arces. De forma general, prefieren suelos ligeramente ácidos, bien drenados y ricos en materia orgánica.

Si el terreno es arcilloso o demasiado alcalino, puede generar problemas como la clorosis, una deficiencia de hierro que amarillea las hojas. Esto puede corregirse utilizando quelatos de hierro específicos, aunque lo ideal es aportar compost, turba o perlita para mejorar el pH.

En bonsáis, lo más frecuente es usar mezclas como Akadama, pomice y un poco de turba o mantillo. Una buena fórmula es 60 % mantillo, 20 % turba y 20 % arena gruesa, asegurando una alta capacidad de drenaje para evitar el encharcamiento.

Cómo regar correctamente un árbol de arce

Los arces necesitan riego regular, pero sin excesos que provoquen acumulación de agua en las raíces.

  • Autumn Blaze y Matador™: durante los primeros años, requieren unos 2,5 cm de agua a la semana. Una vez establecidos, soportan cierto grado de sequía, pero es mejor regarlos durante los veranos calurosos.
  • Arce japonés: necesita un suministro constante de agua para mantener su fragilidad. Sufre mucho con la sequía y el calor seco, especialmente si está en maceta como bonsái. El riego debe ser profundo y solo cuando el sustrato comience a secarse en superficie.

Evita regar durante heladas o si el suelo está ya húmedo. Utiliza regaderas con agujeros finos. Nunca pulverices hojas si no lo haces con un tratamiento fungicida y bajo condiciones controladas.

Abonado: cuándo y cómo hacerlo

La fertilización varía dependiendo del estado y tipo de árbol:

  • En árboles jóvenes se recomienda fertilizantes ricos en nitrógeno para fomentar el crecimiento rápido y el desarrollo de tronco.
  • En ejemplares adultos o bonsáis formados, se debe usar abono equilibrado o bajo en nitrógeno, para evitar entrenudos largos y favorecer ramas más compactas.

Para el bonsái de arce japonés, puedes utilizar abonos orgánicos. La fertilización se realiza entre primavera y otoño, nunca en invierno ni justo después del trasplante.

Poda y mantenimiento del árbol de maple

La poda cumple varios objetivos: mejorar la estructura, eliminar ramas muertas, reforzar el crecimiento y controlar el tamaño.

Autumn Blaze y Matador™: se podan en invierno o a comienzos de primavera. Bastará con quitar ramas cruzadas, dañadas o que comprometan la forma del árbol. Es importante no cortar en exceso, ya que al ser árboles de rápido crecimiento, pueden desarrollar uniones de ramas débiles.

Bonsáis de arce japonés: además de podar en otoño o tras la caída de hojas, se realizan pinzados durante el verano para reforzar la ramificación fina. También puedes defoliar parcialmente en verano para reducir el tamaño del follaje. No realices podas drásticas si tu árbol no está sano.

Trasplante y cambio de ubicación

El arce japonés en bonsái requiere trasplante cada 1-2 años si es joven y cada 3-5 años en ejemplares adultos. La época adecuada es a inicios de primavera, justo antes de que comience a brotar.

Durante este proceso, analiza bien las raíces: corta las que estén dañadas, controla la proporción raíz-copa (dejando al menos un 30 % más de raíces que de ramas) y utiliza sustratos nuevos, nunca reutilizados.

En arces grandes plantados en suelo, el trasplante no es tan habitual, pero conviene evitar zonas de mal drenaje o con exposición extrema al sol.

Alambrado y formación

Rama de arce.

El alambrado se usa más en bonsáis para modelar la forma del árbol. Es importante hacerlo cuando no haya hojas, preferiblemente en invierno o principios de primavera.

Usa alambre de aluminio cubierto de papel para proteger la corteza. Las ramas finas del arce japonés son extremadamente sensibles y fáciles de dañar, así que trabaja con delicadeza.

No dejes el alambre más allá de unos meses. El crecimiento rápido puede hacer que se incruste en la corteza, dejando marcas permanentes.

Plagas y enfermedades comunes

Aunque son árboles bastante resistentes, los arces pueden verse afectados por diversas plagas:

  • Pulgones: se concentran en los brotes tiernos. Son fáciles de tratar con productos específicos.
  • Ácaro de las agallas: produce abultamientos rojos en las hojas. Es inofensivo, pero poco estético.
  • Verticillium: hongo que ataca el sistema vascular. Puede secar ramas enteras. Una vez presente, es difícil de erradicar. Prevenir con herramientas desinfectadas y evitar el exceso de humedad.
  • Hongos en raíces: aparecen por encharcamiento. Impiden la absorción de nutrientes y pueden matar al árbol.

Para evitar estos problemas, asegúrate de regar solo cuando sea necesario, no mojar las hojas y aplicar tratamientos preventivos fungicidas en primavera y otoño.

Multiplicación y reproducción del arce

Los arces se multiplican de varias formas según la especie:

  • Semillas: poco fiables para variedades híbridas. Mejor recogerlas frescas en otoño y sembrarlas en primavera tras estratificarlas en frío.
  • Esquejes de rama: en primavera o verano. Usa estimuladores de raíces y mantén humedad constante.
  • Acodo aéreo: ideal para conservar características genéticas específicas. Se realiza en primavera.
  • Esquejes de raíz: cortando trozos de unos 10 cm y plantándolos horizontalmente.

En bonsái, el acodo aéreo es muy utilizado para obtener formas controladas y evitar largas esperas de crecimiento.

Macetas y elección del contenedor

Los arces japoneses bonsái necesitan macetas acordes a su forma. Lo más recomendable son macetas ovaladas o redondas y esmaltadas, especialmente si las hojas son coloridas. Deben ser resistentes a las heladas y con buen drenaje.

No se recomiendan recipientes oscuros o muy profundos. Un recipiente plano permitirá que el nebari (base de las raíces) destaque más visualmente.

Variedades de arce más populares

Existen más de 250 cultivares de arce japonés. Algunas de las más apreciadas para jardinería o bonsái son:

  • Dissectum: hojas finamente divididas, muy decorativas.
  • Bloodgood: hojas púrpura intenso, resistente al sol.
  • Katsura: hojas que viran a naranja y aroma a caramelo.
  • Osakazuki: espectacular color rojo en otoño.
  • Hishigashira: hojas densas en espiral, ideal para bonsái compacto.

En cuanto a los híbridos, tanto el Autumn Blaze como el Matador™ son ideales para quienes buscan un árbol majestuoso, de bajo mantenimiento, con colores espectaculares y que no requiera grandes conocimientos de jardinería.

Los árboles de maple, en cualquiera de sus formas, son una excelente elección para decorar jardines, parques o incluso terrazas. Aunque cada variedad tiene sus secretos, con una correcta ubicación, control del riego, poda sensata y atención a plagas, estos árboles pueden regalarte años de belleza intensa. Ya sea por su sombra en verano, su color en otoño o su elegante silueta invernal, el maple siempre será un árbol que vale la pena cuidar.


Viewing all articles
Browse latest Browse all 3898


<script src="https://jsc.adskeeper.com/r/s/rssing.com.1596347.js" async> </script>